Hablando de hablar



Siempre te dicen que hay que viajar para expandir tu mente, conocer lugares, pero sobre todo hablar con la gente. El otro día me tocó viajar a Londres, y el taxista (más bien señor de Uber) que me llevo al hotel era de Turquía, con novia gallega que vivía en Londres... una mezcla un tanto extraña y con una visión muy particular del mundo. Una de las cosas de las que hablamos durante el trayecto fue de cómo comunicarnos. Y eso me hizo pensar. En ese momento hablaba inglés pues estaba en Reino Unido, pero ¿qué pasa si estas en un país que utilizan otro idioma?, ¿cómo me comunico? pues la verdad es que tengo experiencias de todo tipo, así que os voy a contar alguna reflexión y así sacáis vuestras propias conclusiones para la vida.

El inglés es muy importante, si me hubiesen dado un euro por cada vez que he escuchado esa frase... sería más rico que Amancio. Pues ahora descubro la razón que tenían.
Lo primero, decir que en Holanda hablan perfecto inglés, además que hacen por entenderte si tu no lo hablas muy bien. Es importante destacar que les encanta el español (y que hay muchos españoles también), por lo que no es raro encontrarte con gente que habla nuestro bello idioma, así que ten cuidado con lo que dices en voz alta... También hay que destacar, que cuando llevas un tiempo viviendo aquí, esperan que hables su idioma (cosa que veo lógica). Así que ya sabes, si te vas a vivir a otro país, intenta acomodarte a ellos, no ellos a ti!

En los países nórdicos, también me he encontrado un muy buen nivel de inglés (aun que más que yo es fácil), por lo que no habría ningún problema en comunicarte con ellos, además que siempre quedará ese idioma universal que todos utilizamos, hablar muy alto español y gesticular mucho. Parece que no, pero funciona... un poco por lo menos.
Sobre los países de habla inglesa no hace falta que diga nada, sólo que depende sitios, si no tienes un perfecto acento inglés no ponen ningún interés por entenderte, y eso saca de quicio a cualquiera. Puedes estar hablando con un londinense un rato, y cuando acabas tu monólogo, te dice que no te ha entendido ni jota... para matarlos.

Seguimos nuestra ruta, y la siguiente parada es Italia. Allí más o menos nos entendemos, aunque no todo el mundo habla inglés, de hecho si vas a las afueras de las ciudades, ninguno te va a hablar en inglés, pero al tener un lenguaje similar al nuestro, es más fácil comunicarte. Yo he conseguido que me recomienden una buena pizzeria sólo hablando en español y ellos en italiano, y en la pizzeria que acabé estaba todo buenísimo, así que me imagino que nos entendimos.
Lo mismo pasa en Portugal, tenemos nuestro portuñol con el que somos capaces de hacer algo y comunicarnos. Yo estuve hablando 30 minutos de taxi con un señor que me hablaba en portugués, yo le hablaba en español y acabamos quedando en Ibiza para irnos de fiesta... que me vaya esperando allí.
El mayor problema para mi es Francia... creo que ya sabéis lo que opino sobre el país, pero con respecto al lenguaje es horroroso. Además mi amigo taxista fue lo primero que me dijo, ¿por qué no quieren aprender inglés? Yo no he visto mayor cerrojo a la hora de hablar un idioma como allí. Incluso intentado usar palabras básicas y sencillas, no les interesa entenderte. Fui a una empresa a trabajar, y estuve en un cubículo reducido con un jovencito francés que no hablaba nada de ingles (no explicaré por qué estábamos tan juntos, eso queda para mi vida privada), así que viendo el nulo interés que tenia por seguir mis explicaciones que hasta un niño de 4 años entendería... sólo me quedó tirar de google translator. No es la mejor solución pero hay que reconocer que a veces te saca de un buen apuro.

Recordando todas estas anécdotas, me di cuenta que todos necesitamos algo que nos una a la hora de expresarnos. Entonces, ese señor tan sabio (el taxista de Londres... aquí es donde retomo mi historia principal abstrayendome de mis recuerdos) me explicó su teoría. Todo el mundo debería tener una segunda lengua que fuese la misma para todos. Sin importar cual fuera, pero tener algún vínculo en común para poder comunicarnos, y por supuesto sin perder la lengua materna de cada uno de nosotros, pues nos representa a cada individuo y nuestra cultura. Me decía que él por cada país que había vivido, siempre había aprendido el idioma que tocaba en cada momento, pero esa segunda legua le ayudaba a integrarse y a partir de ahí poder hacer una vida. También, que él a sus hijos les enseñaba su idioma materno, ya que es una parte importante de su cultura.

Con esta conversación, conseguimos llegar a la misma conclusión los 2, no hay que viajar a Francia (es broma claro), y que todos deberíamos tener una segunda lengua común, si el inglés está tan expandido, ¿por qué no? Se puede convertir en el nuevo esperanto...

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